Movilidad Social
Este artículo es un complemento de la información sobre derecho laboral o del trabajo, en esta revista de derecho empresarial. Aparte de ofrecer nuevas ideas y consejos clásicos, examina el concepto y los conocimientos necesarios, en el marco del derecho del trabajo, sobre la movilidad social.
Te explicamos, en relación a la seguridad social y el derecho laboral, qué es, sus características y contexto.
Visualización Jerárquica de Movilidad Social
Asuntos Sociales > Marco social > Estructura social Trabajo y Empleo > Mercado laboral > Mercado laboral > Movilidad profesional A continuación se examinará el significado.
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¿Cómo se define? Concepto de Movilidad Social
Véase la definición de movilidad social en el diccionario. De acuerdo con Eduardo Jorge Arnoletto: Es un concepto sociológico de mucho uso en análisis político porque el fenómeno al cual se refiere tiene grandes consecuencias políticas.
Se refiere a personas o grupos que pasan de una situación a otra: en el espacio (movilidad geográfica, migraciones internas o externas); en la profesión o actividad laboral (movilidad profesional); en la escala o posición social (movilidad social).
Si se trata de un simple cambio equivalente, se habla de movilidad horizontal; si implica un mejoramiento o empeoramiento de la situación anterior, movilidad vertical. Si el sistema social tiene escasa movilidad se lo llama cerrado (como las castas, por ejemplo); si tiene alta movilidad, se lo denomina abierto. El tema políticamente más importante, es, desde luego, la movilidad vertical y el grado de apertura del sistema social, que tiene que ver con el tema de la estratificación social.
Movilidad Individual, Voluntaria y otros Tipos
La movilidad vertical puede ser ascendente o descendente. Otros matices del concepto son los de movilidad individual, generacional, grupal; automática (que resulta, por ejemplo, de un cambio de edad) o voluntaria.
En general, toda persona o grupo aspira a mejorar su situación y está dispuesto a realizar esfuerzos para obtenerla; si se ve impedido de lograrlo por motivos que percibe como injustos, generará tensiones que pueden incluso llegar al enfrentamiento disruptivo con el sistema. Las pautas culturales que acompañan a la modernización (ver supra), al reconocer el valor positivo del cambio, refuerza esa tendencia.
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Historia de la Movilidad Social en Europa Central
En un sistema social compuesto por unidades jerárquicas (órdenes, estratos o clases), los individuos o grupos pueden cambiar de posición (salvo cuando existe una sociedad de clases cerrada ), ya sea hacia arriba o hacia abajo; este fenómeno se conoce como movilidad social o movilidad vertical.
Edad Media y Edad Moderna
En la sociedad de órdenes de la Edad Media y la Edad Moderna, la movilidad social adoptaba dos formas: el ascenso a la élite política o cultural (véase más a continuación) o el declive debido al endeudamiento, el empobrecimiento, la enfermedad o el apego a una función obsoleta (como en el caso de la caballería). La descalificación significaba una pérdida de estatus, cuando los afectados ya no podían vivir de acuerdo con las normas de su orden. Las teorías medievales sobre la pobreza distinguían entre los indigentes a los que habían gozado de un estatus social elevado y lo habían perdido junto con su riqueza ("pobres vergonzantes"). Había que tratarlos con honor y no meterlos en el mismo saco que a los demás pobres.
▷ Élites" box_color="#242256. Expresión utilizada en francés desde el siglo XVII para designar grupos sociales que se distinguen por sus valores y actividades. El término volvió a emplearse en alemán (Eliten) en el siglo XVIII y en italiano (elite) a finales del XIX. Inicialmente perteneció al vocabulario de la filosofía social y la sociología.
Su uso generalizado se remonta a principios del siglo XX, cuando el enfrentamiento ideológico entre izquierda y derecha lo convirtió en un término clave. A partir de entonces, la expresión se utilizó para designar una categoría social específica.
El ascenso social se lograba por diversos medios: enriquecimiento, educación superior, vínculos matrimoniales (connubium) con familias nobles o patricias, uso de redes familiares, clientelismo (véase más a continuación) o asentamiento en una ciudad y adquisición de su burguesía, lo que resultaba cada vez más difícil para los recién llegados en la época moderna.
▷ Clientelismo" box_color="#242256. El clientelismo es una relación de amistad utilitaria entre una persona en una posición sociopolítica elevada, el jefe (paternalismo), y una persona menos importante, el cliente. El primero proporciona al segundo protección (en los tribunales, por ejemplo), acceso a determinados recursos estatales (funciones, subvenciones), condiciones agrícolas o crediticias más ventajosas y una participación en el prestigio social del segundo. El cliente paga estas ventajas con su trabajo, su apoyo político y eventualmente militar, suministrando información o difundiendo la fama del jefe. Una extensión vertical de la red puede resultar de la introducción de intermediarios entre jefes y clientes. Estos "intermediarios", indispensables cuando los socios potenciales están alejados social o geográficamente, rara vez disponen de los recursos que les permitirían ser jefes, y la mayoría son ellos mismos dependientes. Facilitan el acceso a los clientes potenciales y los movilizan para apoyar al jefe; a la inversa, se aseguran de que los clientes no se acerquen al jefe sin supervisión. El papel del clientelismo (véase más sobre su historia y su descripción) en la historia romana se estudia desde hace mucho tiempo; politólogos, sociólogos e historiadores utilizan ahora este concepto para las sociedades del Antiguo Régimen y contemporáneas.
Como demuestran las listas de concejales de los siglos XIII y XIV, el patriciado urbano estaba inicialmente abierto sobre todo a los comerciantes. A finales de la Edad Media, los comerciantes y artesanos ricos pero aún privados de derechos lucharon con los burgueses, organizados en gremios, para acceder al Consejo y adquirir una influencia decisiva en la política urbana. Desde mediados del siglo XV hasta mediados del XVIII, el mercenarismo fue la forma más sencilla de enriquecerse y ascender socialmente (servicio exterior). Las numerosas guerras ofrecían a los jóvenes de las ciudades y del campo, a los jornaleros e incluso a los marginados de la sociedad la oportunidad de alistarse, ya fuera en regiones francófonas o germanófonas, con o sin autorización oficial (Mercenarios). En las familias de patricios y notables, las personas se alistaron como oficiales al servicio de un príncipe extranjero o se convirtieron en contratistas militares, con la esperanza de adquirir riqueza y mejorar su posición social.
No sin riesgos: muchos antiguos soldados, a veces inválidos, no lograban reintegrarse en la sociedad y vivían de la mendicidad. En cuanto a los oficiales militares y empresarios, corrían el riesgo de arruinarse como consecuencia de un fracaso personal o de un revés de la alianza. La educación superior era una especie de capital. Les permitía acceder bien a la profesión eclesiástica (posibilidad que también se ofrecía a los hijos ilegítimos, desfavorecidos jurídicamente y estigmatizados socialmente, siempre que obtuvieran una dispensa pontificia), bien a una administración municipal o principesca, bien al servicio de una casa noble o patricia, como tutor.
Siglos XIX y XX
La caída de la antigua Confederación en 1798 eliminó las barreras entre los órdenes sociales.
Al garantizar la libertad de establecimiento (para los suizos cristianos), la Constitución Federal de 1848 eliminó el principal obstáculo para el ascenso económico de sectores más amplios de la sociedad. Las medidas contra el estatuto de heimatlos, la igualdad para los judíos y la libertad de comercio introducidas en 1874 favorecieron este desarrollo, al que contribuyeron los cambios en la economía a un ritmo constante hasta la Primera Guerra Mundial y aún más después de la Segunda. El rápido progreso de la industrialización a partir de 1860 aportó nuevas fuentes de ingresos, principalmente a las zonas urbanas, que a su vez atrajeron a los habitantes de las zonas rurales en busca de trabajo y a los campesinos que abandonaban explotaciones a menudo demasiado pequeñas (Paysannerie). La mayoría de las veces, la migración interna iba acompañada de un cambio de profesión. Hacia finales del siglo XIX, junto a los obreros, surgió una nueva categoría de asalariados: los trabajadores de cuello blanco, que también estaban abiertos al empleo femenino, sobre todo en las ventas y el trabajo de oficina. La burguesía, detentora del poder, fue la principal beneficiaria del auge económico. Pero al mismo tiempo aumenta el número de pobres. En el campo, la emigración al extranjero, motivada por la pobreza, alcanzó su punto álgido en la década de 1880. La década siguiente se caracterizó por el pauperismo masivo en las ciudades y vio el comienzo de la emigración laboral internacional, a veces fuente de conflictos sociales (el Italianerkrawall de 1896, por ejemplo). Un cierto malestar marcó este periodo de cambios acelerados y mayor movilidad social.
El periodo 1918-1945 se caracteriza por una oposición de clases muy clara, que tiende a congelar la sociedad. La huelga general y la regresión de la política social después de 1918 endurecieron los frentes, del mismo modo que la crisis económica mundial y el desempleo masivo que provocó redujeron considerablemente las posibilidades de movilidad social ascendente.
Sólo cuando las distintas fuerzas políticas se unieron en torno a un consenso nacional frente a la amenaza nazi y fascista, a partir de 1937, las barreras sociales se hicieron menos herméticas. A la Segunda Guerra Mundial siguió una larga fase de crecimiento, propicia a la movilidad social.
Casi todos los sectores de la población mejoraron su nivel de vida y se beneficiaron de una situación más segura.
Sin embargo, a pesar de la intervención gubernamental, se abrió una brecha económica entre los agricultores de las tierras bajas y los de las montañas. Muchos agricultores abandonaron sus explotaciones para aceptar empleos mejor remunerados en las zonas urbanas. Los salarios aumentaron constantemente, lo que permitió el advenimiento de una sociedad de ocio y consumo a partir de la década de 1950. La introducción del AVS en 1947 hizo que las personas mayores fueran más independientes económicamente.
Sin embargo, la prosperidad económica tuvo inicialmente el efecto de endurecer los roles de género dominantes: el sufragio femenino no fue aceptado a nivel federal hasta 1971.
Suiza cuenta desde 1996 con una ley sobre la igualdad entre hombres y mujeres, pero a principios del siglo XXI todavía existen muchas disparidades en el mundo laboral.
Por otra parte, gracias a que trabajadores extranjeros asumieron empleos que no requerían formación, después de 1945 fue más fácil para los empleados suizos convertirse en obreros o empleados cualificados. En el último tercio del siglo XX surgieron nuevas oportunidades de promoción social, sobre todo en los ámbitos del deporte, la cultura y los medios de comunicación. La democratización de la enseñanza permitió a muchos jóvenes procedentes de medios no universitarios acceder a la enseñanza superior. Basado en la experiencia de varios autores, nuestras opiniones y recomendaciones se expresarán a continuación (o en otros artículos de esta revista, en cuanto al derecho laboral o del trabajo, y respecto a sus características y/o su futuro): Tras un periodo de indiferencia que tuvo efectos nefastos, desde los años 90 se han realizado esfuerzos para mejorar la integración de los extranjeros, abriendo perspectivas de movilidad social ascendente. La recesión de 1992-1993 provocó una reducción sin precedentes de los puestos de trabajo en el sector servicios, que sumió a muchos asalariados en el temor a ser arrojados entre los "nuevos pobres".
Conceptos Relacionados con la Movilidad Social
Mecanicismo
Partiendo del principio de que las leyes que gobiernan la materia en todos sus estados son aplicables al comportamiento social, la teoría mecanicista interpreta los fenómenos de la sociedad con la perspectiva de las ciencias físicas, químicas y mecánicas. Analiza también los fenómenos sociales.
Maquinismo
Con la máquina de vapor, la vida social y la economía, primero de Inglaterra, luego del otro lado del Canal de la Mancha, cambiaron radicalmente.
En 1750 los capitalistas y los proletarios eran grupos sociales marginales. Un siglo después fueron las clases más dinámicas de la estructura social europea. Hacia 1850 la máquina de vapor se había incorporado ya a todos los procesos manufactureros.
Mutualismo
El mutualismo es el régimen de prestaciones mutuas que suelen adoptar algunas organizaciones para ayudar a sus miembros que más necesitan, como lo hacen ciertas asociaciones de ahorro y crédito, el seguro social obligatorio, la seguridad social, las organizaciones obreras de socorros mutuos y otras entidades de previsión social.
Minoría
Este es un concepto clave dentro de la vida social, particularmente bajo el sistema democrático. La minoría es la parte menor de los individuos que componen un grupo organizado. Esa minoría puede darse por discrepancias de opinión respecto a un tema o a un conjunto de temas o por diferencias de naturaleza étnica, religiosa, de nacimiento y otras muchas, que han ido variando con la historia y las geografías.
Clase social
La noción de clase social es muy antigua. Aristóteles se preocupó ya de los diferentes grupos que, en función de su riqueza y de su rango, se habían formado en la sociedad. Expresó, con referencia a la realidad social de su tiempo, que existían tres elementos: una clase muy rica, otra muy pobre y una tercera intermedia.
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Movilidad Social y Religión
Asunto: home-religion. Hay una considerable movilidad intergeneracional e intrageneracional en América (Blau y Duncan 1978, plumas y Hauser 1978). Es más probable que los hijos y las hijas suban por encima o caigan por debajo de la posición social de sus padres que ocupar el mismo estatus social.
La movilidad de los resistentes es bastante extensa, ya que las crías tienen aproximadamente tres veces más probabilidades de elevarse por encima de la posición social de sus padres, ya que caen por debajo de ella. La movilidad dramática desde el fondo de la escala ocupacional hasta la cima, o viceversa, no es común. La religión contribuye a esta movilidad, pero también se ve afectada por ella.
Interacciones religión-movilidad
Varios investigadores han sugerido que algunas formas de religión contribuyen a la movilidad. Johnson (1961) argumentó que las sectas de santidad Workingclass abrazan un protestantismo asceta que fomenta un estilo de vida simple, la negación de lujos y placer, un acercamiento racional (medio-fin) a la vida, y la frugalidad económica. Estos valores religiosos promueven la planificación, el ahorro, la acumulación de ingresos disponibles y la movilidad social ascendente (Dearman 1974). Otros investigadores han argumentado que las estrictas demandas de estilo de vida y la oposición a la cultura prevaleciente militan contra la movilidad ascendente. Lenski (1961), por ejemplo, argumentó que la confianza de los católicos en la obediencia a la autoridad de la iglesia y su tendencia a tener familias más grandes sofocaban la movilidad ascendente. La mayoría de las investigaciones también sugieren que la movilidad social contribuye al movimiento entre diferentes tradiciones religiosas. A medida que las oportunidades de vida de las personas mejoran, sus creencias y prácticas religiosas — incluso sus afiliaciones religiosas — probablemente cambien. El patrón predominante es que los miembros de grupos de fe de menor estatus se unan a grupos religiosos que están asociados con estratos más afluentes (consulte más sobre estos temas en la presente plataforma online de ciencias sociales y humanidades). Basado en la experiencia de varios autores, nuestras opiniones y recomendaciones se expresarán a continuación (o en otros artículos de esta revista, en cuanto al derecho laboral o del trabajo, y respecto a sus características y/o su futuro): Baltzell (1958:225) proporciona la descripción siguiente de la lengüeta-en-mejilla de la conmutación ascendente: El americano medio nace hijo de un Bautista o de un agricultor Metodista; después de obtener una educación, se convierte en un empresario en una gran ciudad donde se une a una iglesia Presbiteriana suburbana; Finalmente, al alcanzar el apogeo del éxito económico, se une a una Iglesia Episcopal de moda para satisfacer las ambiciones sociales de su esposa. Este patrón clásico de movilidad social y cambio religioso ha sido ampliamente documentado (por ejemplo, Hoge et al. 1994, Roof y McKinney 1987). El cambio ha sido más común entre los protestantes móviles ascendentes que entre los católicos y los judíos. Varios factores contribuyen a la tendencia de la movilidad a promover el cambio religioso. Uno es el hecho de que los grupos religiosos difieren en clase, estatus y poder. La Iglesia Unida de Cristo y las iglesias episcopales y presbiterianas están vinculadas con privilegios, mientras que los bautistas, nazarenos y otros grupos sectarios se clasifican más bajo en estatus socioeconómico.
Como los individuos móviles ascendentes se esfuerzan para los estilos de vida que son más compatibles con un estatus más alto, algunos se sienten socialmente obligados a cambiar a una denominación que se corresponde con su nueva estación en la vida. Otro factor que vincula la movilidad con el cambio denominacional es el matrimonio interconfesional. Las personas de movilidad ascendente a menudo se casan con personas que pertenecen a religiones de estatus superior. El deseo de compartir la afiliación religiosa de spouse's a menudo conduce a la conmutación, incluso cuando no hay ningún cambio sustancial en las creencias y prácticas religiosas de uno. También es probable que las personas con movilidad ascendente desarrollen nuevas relaciones sociales en el trabajo y en sus vecindarios.
Cambiar a la religión de los nuevos amigos y asociados de uno es probable que tenga recompensas de este mundo, como un círculo más amplio de amigos y relaciones, que mejora el rendimiento (véase una definición en el diccionario y más detalles, en la plataforma general, sobre rendimientos) en el trabajo.
Ha habido varias tendencias recientes en la conmutación religiosa (e.g., Hadaway y Marler 1993).
En primer lugar, la voluntad de cambiar los grupos de fe parece estar aumentando. Esta voluntad refleja el aumento del individualismo cultural y la voluntarismo religiosa, que son más evidentes en las denominaciones protestantes, pero también se producen entre los católicos y los judíos. En segundo lugar, mientras que las denominaciones liberales ganaron la mayoría y los grupos conservadores perdieron más como resultado de la conmutación, los patrones de hoy son un pedacito diferente. Las denominaciones protestantes de la línea principal (liberales y moderadas) y la iglesia católica están perdiendo miembros más rápidamente, mientras que los resultados netos entre los protestantes conservadores han mejorado un poco. Un factor que puede explicar la mayor tasa de retención entre los protestantes conservadores puede ser una mayor polarización económica entre ricos y pobres y el creciente número de personas de clase media que han perdido el estatus socioeconómico. Otro factor puede ser el desarrollo de iglesias grandes, no denominacionales "Megachurches, " que han surgido a lo largo de las principales autopistas en los últimos años. El aumento del conservadurismo cultural, la efectividad de los grupos sectarios en el reclutamiento de nuevos miembros, y la combinación de otras recompensas mundanas y mundanas que ofrecen a las personas móviles también contribuyen a esta tendencia (Finke y Stark 1992, Perrin y Mauss 1991). En tercer lugar, varios estudios recientes discuten la tesis de que la movilidad juega un papel importante en la conmutación (Nelsen y Snizek 1976, Hadaway 1991, Sherkat 1991, Hadaway y Marler 1993). Estos estudios sostienen que la movilidad palidece en importancia en comparación con las influencias familiares y otras relaciones sociales.
Efectos de la movilidad con los grupos: Iglesia y secta
La movilidad a menudo genera cambios dentro de los grupos religiosos. A medida que las sectas de clase obrera evolucionan hacia denominaciones de clase media, tienden a cambiar sus normas y prácticas religiosas (Finke y Stark 1992). Las creencias sectarias que enfatizan la verdad absoluta, las expresiones altamente emocionales de la fe asociadas con avivamientos, y prácticas distintivas como el manejo de serpientes o el uso de latín de los católicos en la misa (véase su definición, y la descripción de eucaristía y Santa Misa) a menudo dan paso a más churchlike énfasis en pariente y interpretaciones simbólicas, formas más secadas de la participación religiosa, y estilos de adoración más culturalmente aceptables. El énfasis sectario en la evangelización de otros también puede dar paso al enfoque de vivir y dejar vivir que parece más compatible con el estatus de afluente. Estas transformaciones han sido especialmente evidentes en grupos como Metodistas Unidos y católicos, que han experimentado una gran movilidad social.
Así, incluso cuando la movilidad no produce cambios en la afiliación, a menudo fomenta los cambios en lo que la gente cree y cómo practican su fe. Desalienta las creencias y prácticas de clase obrera y fomenta las creencias y prácticas que se consideran más compatibles con un estilo de vida de clase media o alta. Mientras que algunos miembros aprueban tales cambios, otros no.
Detalles
Los disidentes sienten que el grupo ha perdido sus raíces, abandonado sus principios originales, y le dio la espalda a la verdad. Asunto: verdad. Un paso frecuente es que los disidentes formen su propia secta, con el objetivo de volver a la cosmovisión original del grupo. Finke y Stark (1992) argumentan que la transformación y reforma de la secta están en el corazón de la historia religiosa americana. Autor: Henry Davis
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Movilidad Social en relación a la Antropología
El diccionario de antropología define movilidad social de la siguiente forma: Cambios o movimientos en la escala social.
La movilidad social puede ser horizontal (dentro del mismo estamento), vertical (cambio de posición de arriba abajo o de abajo hacia arriba) o a través del tiempo. La movilidad social sucede en el área geográfica, religiosa, política, intergeneracional, etc. La movilidad vertical (subir de “status”) es más difícil que la horizontal.
Definición de Movilidad Social en Ciencias Sociales
Asunto: home-ciencias-sociales.
Es el movimiento de un individuo o grupo de una clase o estatus social a otro. Por lo general, el punto de referencia es la clase o el estatus de origen social de un individuo y la movilidad social se produce cuando las posiciones de clase o estatus posteriores difieren de las de origen. La movilidad social sería alta cuando los individuos tienen igualdad de oportunidades para alcanzar nuevos estatus y baja cuando hay desigualdades de oportunidades y procesos de atribución de estatus. Un concepto alternativo se refiere al movimiento ascendente o descendente dentro de un sistema de estratificación. (Tal vez sea de interés más investigación sobre el concepto de sistema de estratificación). La teoría liberal afirma que las sociedades capitalistas son de clase abierta y por lo tanto se puede esperar un alto grado de movilidad social.
Según la teoría liberal, este movimiento dentro de un sistema de estratificación debería ser el resultado de los logros de una persona y no debería basarse en características atribuidas como el sexo, la raza, la región de nacimiento y la posición de clase de los padres. La movilidad social se mide típicamente comparando las posiciones de estatus de los hijos adultos con las de sus padres (movilidad intergeneracional), pero puede medirse comparando la posición de estatus de una persona a lo largo de su propia vida (movilidad intrageneracional). Los sociólogos consideran que la movilidad social es una forma útil de medir la igualdad de oportunidades. Movilidad social también hace referencia a los movimiento de individuos o grupos entre diferentes posiciones socioeconómicas. La movilidad vertical se refiere al movimiento hacia arriba o hacia abajo de una jerarquía en un sistema de estratificación. La movilidad lateral es el movimiento físico de individuos o grupos de una región a otra. Revisor: Lawrence y Mix
Características de Movilidad social
Asunto: asuntos-sociales.
Asunto: trabajo-y-empleo. Asunto: clases-sociales.
Asunto: gestion-de-personas.
¿Qué piensas sobre este tema? ¿Tienes alguna experiencia o ejemplo que quieras compartir? ¿Cuál es tu opinión?
Recursos
A continuación, ofrecemos algunos recursos de esta revista de derecho empresarial que pueden interesar, en el marco de las relaciones laborales o de trabajo y del derecho social, sobre el tema de este artículo.
Traducción de Movilidad Social
Inglés: Social mobility Francés: Mobilité sociale Alemán: Soziale Mobilität Italiano: Mobilità sociale Portugués: Mobilidade social Polaco: Ruchliwość społeczna
Tesauro de Movilidad social
Asuntos Sociales > Marco social > Estructura social > Movilidad social Trabajo y Empleo > Mercado laboral > Mercado laboral > Movilidad profesional > Movilidad social
Véase También
Movilidad geográfica, estratificación DEMANDA DE MOVILIDAD, IGUALDAD DE OPORTUNIDADES. IDEOLOGÍA DE CLASE ABIERTA.
Bibliografía
Información acerca de "Movilidad Social" en el Diccionario de Ciencias Sociales, de Jean-Francois Dortier, Editorial Popular S.A.
E. D (consulte más sobre estos temas en la presente plataforma online de ciencias sociales y humanidades). Basado en la experiencia de varios autores, nuestras opiniones y recomendaciones se expresarán a continuación (o en otros artículos de esta revista, en cuanto al derecho laboral o del trabajo, y respecto a sus características y/o su futuro): Baltzell, Philadelphia Gentlemen (Englewood Cliffs, N.J.: Prentice Hall, 1958) P (consulte más sobre estos temas en la presente plataforma online de ciencias sociales y humanidades). Basado en la experiencia de varios autores, nuestras opiniones y recomendaciones se expresarán a continuación (o en otros artículos de esta revista, en cuanto al derecho laboral o del trabajo, y respecto a sus características y/o su futuro): Blau and O. D. Duncan, The American Occupational Structure (New York: Free Press, 1978) M. Dearman, "Christ and Conformity," Journal for the Scientific Study of Religion 13(1974):437-453 D. Featherman and R. Hauser, Opportunity and Change (New York: Academic Press, 1978) R. Finke and R.
Stark, The Churching of America (New Brunswick, N.J.: Rutgers University Press, 1992) C. K. Hadaway, "Denominational Switching, Social Mobility, and Membership Trends," in A Case Study of Mainstream Protestantism, ed. N. Williams (Grand Rapids, Mich.: Eerdmans, 1991): 491-508 C. K. Hadaway and P. L. Marler, "All in the Family," Review of Religious Research 35(1993):97-116 D. Hoge et al., Vanishing Boundaries (Louisville, Ky.: Westminster, 1994) B. Johnson, "Do Holiness Sects Socialize in Dominant Values?" Social Forces 39(1961):309-316 G. Lenski, The Religious Factor (Garden City, N.Y.: Doubleday, 1961) H. M. Nelsen and W. E.
Snizek, "Musical Pews," Sociology and Social Research 60(1976):279-289 R. D. Perrin and A. L. Mauss, "Saints and Seekers," Review of Religious Research 33(1991):97-111 W.
C. Roof and W. McKinney, American Mainline Religion (New Brunswick, N.J.: Rutgers University Press, 1987) D. E.
Sherkat, "Leaving the Faith," Social Science Research 20(1991):171-187.