Promoción del Comercio
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Basado en la experiencia de varios autores, nuestras opiniones y recomendaciones se expresarán a continuación (o en otros artículos de esta revista, en cuanto al comercio exterior, y respecto a sus características y/o su futuro): Aparte de ofrecer nuevas ideas y consejos clásicos, examina el concepto y los conocimientos necesarios, en el marco del comercio exterior,, sobre este tema. Te explicamos, en relación a los aspectos jurídicos del comercio exterior, qué es, sus características y contexto.
Visualización Jerárquica de Promoción del comercio
Intercambios Económicos y Comerciales > Política comercial > Política comercial Intercambios Económicos y Comerciales > Intercambios económicos > Intercambio comercial A continuación se examinará el significado.
¿Cómo se define? Concepto de Promoción del comercio
Véase la definición de Promoción del comercio en el diccionario.
Promoción de las Exportaciones
Los gobiernos suelen tratar de promover las exportaciones de su país y de fomentar la producción nacional de bienes susceptibles de ser exportados. La promoción de las exportaciones puede considerarse, por tanto, como un objetivo de la política económica (una estrategia de promoción de las exportaciones) o el conjunto de políticas y medidas utilizadas por los organismos gubernamentales y el sector privado para promover la exportación y la producción de bienes y servicios exportables (políticas de promoción de las exportaciones). Los economistas y los responsables de las políticas comerciales se interesan desde hace tiempo por el modo en que las políticas e instituciones comerciales y la estrategia comercial que adopta un país afectan a sus exportaciones y a sus resultados económicos en general. Las cuestiones que generan este interés son controvertidas. Existen diferencias de opinión sobre la relación entre el comercio en general, y las exportaciones en particular, y el crecimiento económico; la influencia de la estrategia comercial en general, y de una estrategia de promoción de las exportaciones en particular, sobre los resultados de las exportaciones; y si los gobiernos deben interferir en los procesos del mercado en general y en los sectores comerciales en particular, y cómo hacerlo. La teoría neoclásica tradicional representa que el comercio expone los mercados nacionales a una mayor competencia, lo que induce un uso y una asignación eficientes de los recursos en función de los precios mundiales relativos.
En ausencia de fallos generalizados del mercado, esta representación proporciona una justificación para limitar la intervención del gobierno y para adoptar intervenciones gubernamentales relativamente neutrales en los sectores de bienes comercializados. Esta apertura resultante de la economía al comercio internacional y a la competencia implica a su vez una orientación hacia el exterior de la estrategia comercial del país, una voluntad de que se produzca tanta especialización de la producción nacional y tanto crecimiento de las importaciones y exportaciones como sea coherente con la apertura de la economía. Sin embargo, es necesario reconocer que las cuestiones de la orientación comercial y el grado de intervención gubernamental (o, en ocasiones, de la Administración Pública, si tiene competencia) en los mercados son analíticamente distintas. La orientación hacia el exterior y la promoción de las exportaciones pueden ser dirigidas por los mercados o por la intervención política. La orientación hacia el interior puede eliminarse mediante el desmantelamiento de las políticas comerciales proteccionistas que sustituyen a las importaciones y el paso a un régimen de libre comercio. La eliminación de los aranceles a la importación y de otras barreras no arancelarias puede considerarse un enfoque de promoción de las exportaciones dirigido por el mercado.
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Basado en la experiencia de varios autores, nuestras opiniones y recomendaciones se expresarán a continuación (o en otros artículos de esta revista, en cuanto al comercio exterior, y respecto a sus características y/o su futuro): Alternativamente, se pueden ofrecer mayores incentivos para producir para los mercados de exportación a través de medidas gubernamentales adicionales para subvencionar las exportaciones y la producción en los sectores de exportación de forma explícita o implícita. Los méritos relativos de estos enfoques alternativos de la promoción de las exportaciones han sido el centro del debate académico y político en este ámbito de la economía internacional, en particular en el contexto de las opciones políticas de los países en desarrollo. Dada la tendencia de los gobiernos a utilizar una combinación de medidas de liberalización de las importaciones y de promoción directa de las exportaciones para aplicar estrategias comerciales más orientadas al exterior, se ha generado una controversia sobre cómo interpretar las pruebas empíricas de las relaciones entre la estrategia comercial, los resultados de las exportaciones y el crecimiento o el desarrollo económico.
Los argumentos en contra de la promoción de las exportaciones
Existe una fuerte corriente de la literatura de la economía del desarrollo que rechaza el enfoque neoclásico de las condiciones de la oferta interna como influencia en los resultados de las exportaciones. Esta corriente considera que el nivel de la demanda externa es fundamental para influir en los resultados de las exportaciones de los países en desarrollo. El pesimismo sobre el crecimiento de la demanda reflexiona sobre la relativamente baja elasticidad de la demanda de productos primarios y sobre la creencia de que el crecimiento de las importaciones de productos manufacturados por parte de estos países se encontraría con respuestas proteccionistas en los países industriales. El pesimismo sobre las exportaciones proporcionó una justificación para reducir la dependencia de la demanda externa y de las condiciones de exportación para el crecimiento y el desarrollo, y condujo en el periodo posterior a la Segunda Guerra Mundial a la adopción generalizada de políticas intervencionistas y orientadas al interior. Las restricciones a las importaciones se adoptaron para proteger a las industrias que producían para el mercado nacional, con el objetivo de hacer crecer la demanda de bienes nacionales mediante la sustitución o el reemplazo de las importaciones. La estrategia comercial de sustitución de las importaciones se aplicaba a través de una serie de medios directos e indirectos, que subvencionaban la producción de bienes importables, gravaban la producción de bienes exportables, o hacían ambas cosas. Los impuestos sobre las importaciones, como los aranceles, o las restricciones cuantitativas a la importación (por ejemplo, licencias o cuotas de importación) subvencionaban implícitamente la producción de bienes importables, mientras que los impuestos a la exportación gravaban explícitamente los bienes exportables. También podrían conseguirse efectos equivalentes por medios menos directos. Las juntas de comercialización de las exportaciones podrían utilizar su posición de monopolio para ofrecer a los exportadores de productos básicos un precio inferior al mundial (o global) por sus exportaciones. La reticencia a alterar un tipo de cambio vinculado ante una alta inflación puede provocar una sobrevaloración de la moneda, reduciendo la competitividad de los precios de las exportaciones en los mercados extranjeros.
El caso de la promoción de las exportaciones
Existen argumentos a priori para fomentar la orientación al exterior basados en los beneficios de una asignación y uso más eficientes de los recursos debido a una mayor competencia.
Puede tratarse de ganancias puntuales que aumentan la renta per cápita, pero que no alteran las tasas de crecimiento estables o a largo plazo de las economías. Más recientemente, las denominadas teorías del crecimiento nuevo o endógeno han proporcionado apoyo teórico al fomento de las exportaciones.
En ellas, el crecimiento de las exportaciones puede, en presencia de rendimientos crecientes y de complementariedades entre la acumulación de capital físico y humano, producir efectos de crecimiento positivos y permanentes. Sin embargo, no fue la llegada de esta nueva rama de la teoría lo que hizo que la mayoría de los economistas y responsables políticos rechazaran las estrategias comerciales de sustitución de importaciones.
En parte, respondieron de forma pragmática a los efectos revelados de la sustitución de importaciones y a las pruebas de los países en desarrollo sobre los altos costes resultantes de la protección. Con la sustitución de importaciones, las fábricas estaban infrautilizadas, las tecnologías de producción eran a menudo demasiado intensivas en capital y el aumento de las regulaciones comerciales creaba altos rendimientos para los grupos de presión y otras formas de búsqueda de rentas. El alejamiento de la sustitución de importaciones fue también en parte una reacción a la evidencia de que algunos países en desarrollo, especialmente en el sudeste asiático, habían desarrollado una capacidad de exportación de productos manufacturados y habían logrado un rápido crecimiento e industrialización. Esto socavó la generalidad, al menos, de los argumentos del ''pesimismo exportador'' para la orientación hacia el interior. Por último, incluso en los casos en los que los responsables políticos no estaban convencidos de los resultados relativos de los países orientados al interior y a la exportación o de los beneficios de pasar de una estrategia a otra, los problemas macroeconómicos y de deuda de sus economías les obligaron a aceptar la reforma de la política comercial como parte de la condicionalidad de los préstamos que necesitaban del Banco Mundial. Los programas de ajuste estructural que se exigían para acceder a estos préstamos fueron un vehículo importante durante los años ochenta y noventa para impulsar la liberalización de las importaciones (reducción y/o eliminación de las barreras no arancelarias, y racionalización y reducción de los tipos arancelarios) y el ajuste de los tipos de cambio (devaluación o depreciación de la moneda). Estas reformas redujeron significativamente el gran sesgo antiexportador que había crecido en los regímenes comerciales de muchos países en desarrollo.
Oportunidades de exportación y mecanismos para el desarrollo de las exportaciones
La globalización y el crecimiento de la economía mundial (o global) han traído consigo un aumento de las oportunidades de los mercados de exportación.
Además, los países recientemente industrializados y exportadores que han tenido éxito demuestran un efecto de "escalera de desarrollo".
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Hay pruebas de que los países más ricos e industrializados han sido desplazados como exportadores, primero de productos manufacturados estandarizados que requieren mucha mano de obra y, posteriormente, de productos menos estandarizados y más intensivos en capital. Este desplazamiento ha sido realizado por países en desarrollo de diferente tamaño. La aparición de nuevos exportadores a gran escala, como China, India y México, puede hacer que otros pequeños y potenciales participantes tardíos se preocupen por la existencia de fuerzas de aglomeración de la producción internacional que dificulten la futura entrada en la exportación.
Sin embargo, estos nuevos países exportadores también ofrecen oportunidades de mercado adicionales para los bienes finales e intermedios.
Además, la creciente fragmentación de la producción internacional aumenta estas oportunidades de mercado tanto en los países desarrollados como en los países en desarrollo. De hecho, el enfoque clave de la literatura sobre el desarrollo de las exportaciones se ha alejado de la preocupación por la ausencia de oportunidades de exportación cuando todos los países intentan simultáneamente promover las exportaciones (a menudo denominado el problema de la ''falacia de la composición'') para identificar las limitaciones internas y externas del desarrollo de las exportaciones. En los años 50 y 60, la atención se centró en las limitaciones externas, incluida la cuestión del acceso al mercado de los países industriales. Se consideraba que las elevadas barreras comerciales, especialmente contra las importaciones de gran intensidad de mano de obra, como los textiles, el vestido y el calzado, limitaban el crecimiento de las exportaciones de los países en desarrollo. Esto condujo a la incorporación de los principios de trato ''especial y diferenciado'' para los países en desarrollo en el Acuerdo General sobre Aranceles y Comercio, que permitió a los países industrializados ofrecer un acceso preferencial a sus mercados para las exportaciones de los países en desarrollo. Los beneficios de las preferencias (aranceles más bajos que los aplicados a las exportaciones de los países que no reciben preferencias) se han visto debilitados posteriormente por la liberalización comercial multilateral que han aplicado los países industrializados.
En general, han reducido sus barreras arancelarias y no arancelarias de forma significativa, aunque el acceso al mercado puede seguir estando muy restringido en productos concretos en los que las medidas de protección contingentes (por ejemplo, los controles antidumping) y los reglamentos (por ejemplo, las normas técnicas y sanitarias) restringen las importaciones. La continua y reducida participación de los países en desarrollo en el comercio mundial (o global) hizo que, a partir de los años setenta, la atención se centrara en el papel de las propias políticas comerciales de los países en desarrollo en la limitación del desarrollo de las exportaciones. Como ya se ha señalado, las elevadas barreras a la importación y otras medidas proteccionistas crearon importantes fuentes de sesgo antiexportador. Las reformas comerciales unilaterales y regionales de las últimas décadas han reducido significativamente esta limitación al desarrollo de las exportaciones.
Sin embargo, antes de liberalizar sus importaciones, muchos países en desarrollo experimentaron tratando de promover simultáneamente la sustitución de importaciones y la exportación, es decir, complementar las medidas existentes de sustitución de importaciones con incentivos fiscales para la exportación. En términos generales, la promoción simultánea de la producción de productos sustitutivos de las importaciones y de productos exportables puede compensarse mutuamente, haciendo que la economía alcance precios relativos similares a los del libre comercio si los incentivos para ambos sectores son de magnitud similar.
Sin embargo, gravar las importaciones y subvencionar las exportaciones absorberá recursos para recaudar y gastar los impuestos. Los costes de la administración de las políticas pueden evitarse con el libre comercio.
Aviso
No obstante, los gobiernos suelen ser reacios a liberalizar las importaciones por razones ideológicas y de economía política. Una de las estrategias seguidas por los gobiernos reformistas fue la de continuar con un régimen general de sustitución de importaciones, creando al mismo tiempo enclaves de producción para los mercados de exportación. Las empresas nacionales y las extranjeras potencialmente libres de impuestos dentro de estos enclaves, o zonas de procesamiento de exportaciones, a menudo obtenían acceso a insumos y bienes de capital importados libres de impuestos o a insumos subvencionados y estaban sujetas a acuerdos fiscales preferenciales sobre las rentabilidades que no se aplicaban a las empresas del resto de la economía. Tales acuerdos tienden a dar lugar a problemas de supervisión asociados con el intento de evitar la fuga de la producción subvencionada en el mercado interno. También se reconoce cada vez más que la exportación requiere el acceso a insumos y servicios fiables y de bajo coste, lo que es más probable cuando los exportadores están integrados en economías competitivas y abiertas. A finales del primer decenio del siglo XXI la atención se ha desplazado de las limitaciones de la política comercial a otras limitaciones políticas y no políticas del desarrollo de las exportaciones.
Detalles
Los defensores de la orientación hacia el exterior de las políticas comerciales reconocen cada vez más que la reforma de la política comercial puede no ser una condición suficiente para mejorar los resultados de las exportaciones. La promoción de las exportaciones puede requerir la mejora de las instituciones (para apoyar una mejor comercialización de las exportaciones o proporcionar créditos comerciales más baratos) y la mejora de las infraestructuras (mejores carreteras para el abastecimiento interno de insumos y la distribución o servicios de transporte internacional más baratos y fiables). Cada vez hay más pruebas de que los efectos "impositivos" sobre las exportaciones que se derivan de las propias políticas comerciales de los países en desarrollo o de las políticas comerciales de sus socios comerciales son, por lo general, menos importantes que los que se derivan de las ineficiencias o insuficiencias de los servicios locales y de los proveedores de insumos, de las instituciones locales, tanto del sector privado como del público, y de las infraestructuras nacionales y regionales de comunicación y transporte. De hecho, se reconoce que la promoción de las exportaciones es un concepto mucho más amplio que el de la postura de la política comercial del país por sí sola.
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Basado en la experiencia de varios autores, nuestras opiniones y recomendaciones se expresarán a continuación (o en otros artículos de esta revista, en cuanto al comercio exterior, y respecto a sus características y/o su futuro): Abarca medidas para reducir los costes de producción en general y para reducir los costes de transporte (interno e internacional) en particular. Datos verificados por: Brooks
Características de Promoción del comercio
Asunto: intercambios-economicos-y-comerciales.
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Recursos
Traducción de Promoción del comercio
Inglés: Trade promotion Francés: Promotion des échanges Alemán: Förderung des Handels Italiano: Promozione degli scambi Portugués: Promoção das trocas Polaco: Promocja handlu
Tesauro de Promoción del comercio
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Véase También
Fomento de la exportación
Fomento de los intercambios comerciales
Fomento del comercio
puertos, zonas y depósitos francos
Régimen Aduanero de Zonas Francas
Promoción de las exportaciones
Fragmentación
Organización Internacional del Trabajo
Externalización
Deslocalización
Economía Internacional, Geografía Económica, Relaciones Comerciales Internacionales, Zonas, Zonas Económicas
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